Las instalaciones de paneles solares en las cercanías de los aeropuertos pueden ir desde algunos [kW] hasta grandes instalaciones de varios [MW].
Los módulos fotovoltaicos generalmente están compuestos de celdas de silicio, conectores y vidrio, y están diseñados para absorber la mayor cantidad posible de la radiación solar para su conversión en electricidad. Sin embargo, es posible que una parte de esta radiación sea reflejada en ciertos ángulos en los que incide la luz sobre la placa de vidrio.
Aunque este fenómeno no tiene un gran impacto en zonas desérticas, es importante cuantificarlo en el tráfico aéreo cuando las plantas solares se localizan cerca de un aeropuerto.